domingo, 7 de agosto de 2011

Prueba fehaciente nº. 1

La primera prueba fehaciente de que la música está dentro de todas las personas, de que está en nuestro cerebro y de que ocupa una región exclusivamente dedicada al procesamiento musical y memoria musical.

Te encuentras en un concierto, ya sea sólo o con tus amigos/pareja. El grupo que toca esa noche presenta su último disco, grabado con dedicación y cariño. Es un concierto PARA los fans. Pero obviamente irá gente que nunca ha oído hablar del grupo.  Que nunca ha escuchado una canción suya, que ni si quiera sabe qué estilo musical es el del grupo en cuestión. Tal vez seas tú, tal vez sea el de al lado.

Y empieza el concierto. Los más incondicionales cantan a voz en grito la canción que suena, los más tímidos se limitan a agitar la cabeza al son del bombo, de la caja, de la guitarra (demasiadas cosas para un cuello, ¿no?) y se dejan arrastrar por el ritmo.

Y aquí entramos en el asunto de la entrada: la gente que no conoce la canción se adhiere al ritmo de ésta desde el segundo cero. Marca los compases perfectamente, sabe cuándo va a entrar el estribillo e incluso cuándo va a acabar la pieza.

¿Por qué?
Por lo simplemente perfecta que es la música, diréis algunos.
Porque se dejan llevar por lo que la gente de su entorno hace, puede que penséis.
Porque [...]


Es algo innato. Es algo que forma parte del ser humano, el formar parte de un conjunto de personas (por ejemplo los fans de un grupo) y hacer lo que hace la mayoría. Pero es aún más innato todavía  el hecho de dejarse llevar por un ritmo (lo anterior varía mucho de una persona a otra). Inconscientemente, nuestro pie golpea el suelo al compás de la música, sin cesar. Para cuando nos damos cuenta de que estamos moviendo el pie, ya estamos moviendo las manos, golpeándonos suavemente las piernas o el estómago. Y la progresión continúa. Cuando la canción se vuelve especialmente intensa, balanceamos el cuerpo de un lado a otro, empezamos a saltar, a corear el estribillo (si hemos prestado atención a la letra, bien, sino, de nuestra garganta saldrá un "lololo" que encaja divinamente en cualquier pieza) y nos contagiaremos del énfasis que transmiten el cantante y el resto de músicos.

Me gustaría mucho investigar este aspecto, espero poder tener la oportunidad en un futuro para hacerlo. Cosas como la musicoterapia...Un mundo inmenso en el que me gustaría embarcarme.

Y todo esto viene a que anoche asistí al que fue el mejor concierto que Radiocaster ha dado nunca (en mi opinión como fan y amigo de los miembros de la banda). Me gustó especialmente la versión de "The Passenger", en la que pudimos escuchar a Asier cantando al más puro estilo de Iggy Pop. Sin duda la parte más espectacular de su concierto fue el solo de guitarra de Tamés en el tema "Rock suave" de Loquillo. Emulando al mismo Hendrix se puso la guitarra a la espalda y con una sonrisa en los labios lo dio todo con su Telecaster. No faltó la parte emotiva cuando David dedicó unas palabras de agradecimiento a todo el grupo por concederle la oportunidad de tocar con ellos.

Sin duda Radiocaster puso el listón alto para los otros dos grupos que tenían que tocar esa noche. Se superaron a sí mismos y no fueron menos espectaculares que Oreindik o The Amendoins (estos últimos presentando una maqueta que tiene MUY buena pinta). Se notaron los años sobre un escenario que llevan los de Oreindik, que marcaban un ritmo funky muy contagioso. Además ofrecían gratis su maqueta que ya he escuchado y puedo decir que es genial. Intentaré asistir a su próximo concierto.

Los de The Amendoins echaron mano de su talento (especialmente el del bajista y cantante) y dieron cierre a una velada musical que dejó al Guardetxe temblando. Tocaron canciones viejas para los más incondicionales y también nos deleitaron con algunas de las canciones que componen su último disco.
La guinda la pusieron con una versión genial de "My Generation" en la que, yo por lo menos, me dejé la garganta.

Sin embargo me faltó la versión que hacen de "Can't Stop"...Al parecer no tuvieron tiempo, porque el concierto empezó hacia las 22:20 y pudimos salir de allí (a regañadientes) a las 01:30 de la mañana.



Y así fue mi noche, señores.

¿La vuestra qué tal?

Tema abierto para los comentarios:
¿Cuál es el concierto en el que más habéis disfrutado?

Puede ser un concierto de unos amigos o de una superestrella a la que admiráis desde hace años.

Un saludo.

¡Ah! Os dejo la canción que estaba escuchando mientras escribía las últimas líneas de esta entrada

5 comentarios:

  1. muy bien explicado... nunca me había parado a pensar pero tienes razón. en todo :)

    ResponderEliminar
  2. concierto que más e disfrutado... es dificil decirlo.
    e disfrutado porque el grupo me encanta, o porque han dado un concierto buenísimo, o por la compañia... quien sabe.
    me quedo con un concierto de Kerobia en el Doka(grandísimo concierto de un grupo que me encanta), el de Rammstein en Bilbo (muuuy impresionante, una gran actuación pese a que no me gustan tanto)... La Pulquería en Elizondo (no había oido niuna canción, pero para 14 personas que estabamos... un ambiente perfecto) y podría serguir así enumerando casi todos los conciertos que e visto :)

    ResponderEliminar
  3. El principio de la entrada muy bueno, me acuerdo el primer concierto de Mago de Oz al que fui que no me sabia las canciones y al final acabé junto con mis amigos saltando a morir.
    En cuanto a concierto que mas he disfrutado: Rammstein en 1º fila (bendita cola que hice) y aunque parezca broma, Hamburguesa Vegetal en Bilbao.

    ResponderEliminar
  4. Sólo por el nombre creo que merecerá la pena asistir a un concierto de Hamburguesa Vegetal.

    ResponderEliminar
  5. ¡Guauuu! ¡Pedazo crítica!
    Menudo relato.

    Se me ha puesto la carne de gallina. Y no se cuantas sonrisas he esbozado, creo que no me quedan dedos.

    Sí, y me he sentido identificada. Una vez estuve en un concierto en el que no conocía al grupo, no mucho al menos. Y aun así me encantó, me gustó mucho, y me dió pena cuando finalizó. Dejando en mí un buen recuerdo y ganas de más.

    La letra poco a poco surgía en mí. Y así es como empiezas a interesarte por un grupo, uno al que no conocías.

    ResponderEliminar

Buscar este blog